El día 1 de Mayo, partimos desde el puerto de Rafina hacía Mykonos Paradise. Tras un viaje de 6 horas atracamos en el puerto de esta isla, en donde alquilamos un coche que nos serviría para movernos por la misma y pusimos rumbo hacía el camping Mykonos.
Allí nos encontramos un camping semiabierto, es decir, estaba en muy baja temporada, por lo que el dueño nos lo dejo por 5 euros la noche. El camping se encuentra a 10 min del pueblo y las habitaciones son de 6 personas, se trata de cuatro paredes con techo de cañizo, pero están del carajo. Esta situado al lado de una cala de agua transparente y aunque la playa no es de arena fina, es todo un lujo estar por allí bebiendo cervezitas y bañándote. El dueño es un cachondo y lo primero que hizo fue colocarnos al lado de un grupo de catalanas que también estaban en nuestro camping.
El primer día paso entre las cervezas, la playita, reunión con los erasmus en Psaouros (Psauros), partidito de fútbol playa y pub “Argos” en el puerto viejo.
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| Mykonos Experience |
Al siguiente día mis carnes fueron testigo de una experiencia religiosa, jeje. Despertarte después de un día de fiesta e irte directamente a la playita a bañarte y tomar el sol, con los colegas, de “garinbeo” ( término utilizado por los majoreros [habitantes de Fuerteventura] … no tiene precio. Luego al Paradise Club con nuestra nevera llena de mojito, música, fiesta, mojito y buena compañía.
Esa noche, cuando más ambientados estábamos llegamos al Pub donde estaban los erasmus, pero que sorpresa la nuestra cuando no nos dejaron entrar. Su razón era la siguiente… It’s too late to come in… ¿hora? … 3:00 de la noche. Como no nos dejaban entrar pues nos quedamos fuera porque también había música y se estaba del “mamet”. Al portero se le cambio la cara al ver que no nos íbamos y que estábamos bebiendo en su puerta. Al rato nos dimos cuenta que eso de “too late” era una excusa porque los demás Erasmus seguían entrando, es que tendremos malas pintas o algo? Total, que entre pitos y flautas nos volvieron a dar las 6 de la mañana.
Llegamos al camping y no se sí fue por la ingesta de red bull desmesurada o porque no tenía ganas de dormir, que decidí tirarme al agua y bucear un ratito. Al final me salí, no porque tuviera frío sino porque pensé que debía tenerlo, pero por algo, no me preguntes por qué, no lo sentía XD.
El día 3, nos levantamos ya un poco más destrozados, la fiesta empieza a pasar factura, pero “dem pirazei” (dont worry), un poquito de playa y adivina qué… garinbeo y todo solucionado.
Por la tarde tocaba Super Paradise, pero el viento nos lo fastidió un poco. Eso sí, cuando mejor estábamos, decidimos, no se la razón, ir a otra playa donde había más Erasmus y se suponía que también, música. El final de esta historia es que, tras hacer el ganso con las pelucas en el coche y en la moto, llegamos a una playa bastante peor que la que estábamos y con una radio a pilas. Pero que no pare la fiesta!!!
Noche del día 3: Volvemos al pueblo y bebemos en el parking, tras hacer unos cuantos comentarios graciosos sobre el tema “Ojete Puig” nos vamos para el pub. En el Skandinavian se estaba más a gusto que un arbusto!!! Las jugadas más destacadas de la noche fueron:
- Paris Hilton and companies y sus crusaitos.
- La caída con doble tirabuzón y medio de los dos que se estaban enrollando encima de la tarima, que melonazo tenían y que melonazo dieron.
- El bofetón de la rubia a la morena al final de la noche, peleandose por un tío que se las había comido a las dos.
Y es así, así como acaba esta estancia en Mykonos…Cogemos el ferry y dejamos atrás:
- El Puffaito, el crusaito, el brekidans, el “ojete Puig”…
